El papel crucial de los envases tipo brick en la industria alimentaria

La diversidad de tipos de empaques de tipo brick no solo satisface las necesidades de los fabricantes en términos de funcionalidad y presentación, sino que también brinda a los consumidores opciones convenientes y accesibles para una variedad de productos líquidos. Este aspecto contribuye a su popularidad y versatilidad en el mercado.

Entre la practicidad y la sostenibilidad, los envases tipo brick han surgido como una solución integral que redefine la forma en que percibimos y consumimos productos. Este análisis exhaustivo se sumerge en los aspectos fundamentales de estos envases como características, ventajas y su evolución hacia prácticas más sostenibles.

¿Qué son?

Los envases de tipo brick, también conocidos como empaques brick o tetra brick, son una innovadora solución de envasado diseñada para contener una amplia variedad de productos. Su característica distintiva es su forma rectangular y su estructura laminada, compuesta generalmente por capas de papel, plástico y aluminio. Este diseño proporciona una combinación única de resistencia, durabilidad y capacidad de preservar la frescura de los productos contenidos en su interior.

Estos envases fueron introducidos por primera vez en la década de 1960 por la empresa sueca Tetra Pak y desde entonces se han convertido en una elección popular en la industria alimentaria. Su aplicación abarca una amplia gama de productos, incluyendo jugos, leche, sopas, salsas, y otros líquidos alimenticios.

El empaque tipo brick consta de capas que cumplen funciones específicas:

• Capa externa de polietileno: proporciona resistencia al agua y protección contra la humedad, asegurando la integridad del envase.
• Capa de papel: aporta resistencia estructural y permite la impresión de información, gráficos y branding.
• Capa de aluminio: actúa como barrera contra la luz, el oxígeno y otros factores que podrían afectar la calidad y frescura del producto contenido.
• Capa interna de polietileno: garantiza la seguridad alimentaria al evitar la interacción del producto con las capas externas.

Estos envases son conocidos por su practicidad y versatilidad. Su diseño hermético y sistema de apertura y cierre facilitan la vida del consumidor, permitiéndoles verter el líquido de manera controlada y volver a cerrar el envase de manera segura.

Además, los empaques de tipo brick son ideales para el consumo fuera de casa debido a su portabilidad y la capacidad de mantener el contenido fresco sin necesidad de refrigeración inmediata. Su forma rectangular también optimiza el espacio durante el transporte y almacenamiento, haciendo que sean eficientes en términos logísticos.

¿Cuáles son sus ventajas?

Ofrecen una serie de ventajas que los posicionan como una elección preferida tanto para consumidores como para fabricantes en la industria alimentaria. A continuación, profundizaremos en algunas de las principales ventajas de estos innovadores envases:

Eficiencia en el espacio:

Los envases de tipo brick están diseñados para maximizar la eficiencia en el espacio durante el transporte y almacenamiento. Su forma rectangular permite un encaje óptimo en paletas y estanterías, reduciendo el espacio requerido y, por lo tanto, los costos logísticos asociados.

Preservación de la frescura:

La combinación de capas, incluyendo papel, plástico y aluminio, crea un envase hermético que protege el contenido de la luz, el oxígeno y la humedad. Esto contribuye significativamente a la preservación de la frescura y calidad de los productos líquidos, prolongando su vida útil.

Facilidad de manejo:

La forma y el sistema de apertura y cierre de los empaques de tipo brick ofrecen una experiencia de usuario intuitiva y conveniente. Los consumidores pueden verter el líquido de manera controlada, y la posibilidad de volver a cerrar el envase sin derrames facilita su manejo en el día a día.

Versatilidad en contenidos:

Estos envases son versátiles y se adaptan a una amplia gama de productos líquidos, desde jugos y leche hasta sopas y salsas. La diversidad de opciones de personalización permite a los fabricantes utilizarlos para diferentes tipos de productos y estrategias de marketing.

¿Cuáles son los tipos más comunes?

Los empaques de tipo brick se adaptan a diversas necesidades de la industria y del consumidor, y existen diferentes tipos según el producto que contienen. A continuación, exploraremos algunos de los tipos más comunes de estos versátiles envases:

• Para bebidas: los empaques de tipo brick son ampliamente utilizados en la industria de las bebidas. Pueden contener jugos, leche, batidos y otras bebidas. La versatilidad en tamaños y formas hace que sean ideales para envasar productos líquidos de diferentes viscosidades.
• Para alimentos: algunos empaques de tipo brick están diseñados específicamente para contener alimentos líquidos como sopas y salsas. Su capacidad para mantener la frescura y facilitar el vertido controlado los convierte en una opción práctica para este tipo de productos.
• Personalizables: existen empaques de tipo brick que permiten la personalización en términos de forma y tamaño. Esto es especialmente beneficioso para fabricantes que desean destacar su marca y diferenciar sus productos en el mercado. La capacidad de imprimir información detallada y atractivos gráficos contribuye a fortalecer la identidad de la marca.
• Para productos específicos: además de bebidas y alimentos, los empaques de tipo brick se utilizan para una variedad de productos líquidos, como productos de cuidado personal y productos para el hogar. Su diseño adaptable los hace aptos para diversas categorías de productos.

La diversidad de tipos de empaques de tipo brick no solo satisface las necesidades de los fabricantes en términos de funcionalidad y presentación, sino que también brinda a los consumidores opciones convenientes y accesibles para una variedad de productos líquidos. Este aspecto contribuye a su popularidad y versatilidad en el mercado.

La sostenibilidad es un aspecto crucial en la actualidad y los empaques de tipo brick no son ajenos a esta preocupación. Examinemos la sostenibilidad de estos envases y cómo algunos fabricantes han abordado esta cuestión:

• Materiales reciclables: algunos empaques de tipo brick están fabricados con materiales reciclables, lo que significa que después de su uso, pueden ser recolectados y procesados para ser transformados en nuevos productos. Esta característica contribuye a la reducción de residuos y fomenta la economía circular.
• Materiales renovables: en línea con las prácticas sostenibles, algunos fabricantes han optado por utilizar materiales renovables en la fabricación de empaques de tipo brick. Esto implica el uso de recursos naturales que pueden regenerarse, disminuyendo la dependencia de materias primas no renovables.
• Programas de reciclaje: además de la fabricación sostenible, algunos fabricantes participan en programas de reciclaje, facilitando la recolección y el reciclaje de los envases tipo brick. Estos programas pueden incluir puntos de recolección especiales o asociaciones con instalaciones de reciclaje locales.
• Compromiso con la sostenibilidad ambiental: algunas marcas han establecido compromisos con la sostenibilidad ambiental, adoptando prácticas que van más allá de la fabricación de los empaques. Esto puede incluir esfuerzos para reducir la huella de carbono en la cadena de suministro y participación en iniciativas globales para abordar los desafíos ambientales.

Es importante destacar que la sostenibilidad de los envases tipo brick puede variar entre diferentes marcas y productos. Los consumidores interesados en apoyar prácticas sostenibles deben revisar la información proporcionada por los fabricantes, como las etiquetas y los sitios web, para tomar decisiones informadas sobre sus compras.